3 VESTIDOS PARA PLANES POST-PLAYA QUE METERÁS EN TU MALETA

BIENVENIDO, VERANO: TE ESTÁBAMOS ESPERANDO

EL VESTIDO IDEAL PARA VIVIR LA GOLDEN HOUR EN EL MAR

Hay algo en los planes que suceden después de la playa que se sienten aún más veraniegos que la propia playa. El after beach tiene un aire hedonista, despreocupado y sofisticado que solo se consigue en julio o agosto, cuando el mar aún huele en la piel y el atardecer empieza a insinuarse. Para esos momentos en los que no quieres renunciar ni a la comodidad ni al estilo, Hannibal Laguna Collection propone tres vestidos con alma estival y más libre que nunca, diseñados para acompañarte del chiringuito al cóctel, del mar a la terraza.

1. UNA PUESTA DE SOL CON CÓCTEL INCLUIDO

Inspirado en los paisajes quemados por el sol y en la vegetación que sobrevive entre dunas, el vestido Verdino es una oda a los colores del verano mediterráneo: óxido, tierra, olivo, espuma. Su escote halter anudado y su caída fluida lo convierten en una segunda piel que se mueve con la brisa y baila con la luz del atardecer. Perfecto para ese plan de "nos tomamos solo una" que se convierte en noche inolvidable. Con unas sandalias doradas, eres tú y el verano.

PVP 164 €.

2. UNA COMIDA EN LA PLAYA

Hay un tipo de vestido que lo dice todo sin decir nada. El Vecoral es ese básico elevado que nos hace sentir elegantes sin esfuerzo. De punto blanco, sin mangas y con una silueta recta que acaricia el cuerpo sin marcar, es ideal para quienes prefieren la discreción con mucha luz antes que algo llamativo. Funciona igual de bien sobre un bikini con el pelo mojado que con un moño pulido y unos labios rojos al caer la tarde. La sofisticación tranquila también existe.

PVP 99 €.

3. UN PASEO MARÍTIMO

Y luego está ese vestido que te transforma. El Vopelín Coral es el equivalente textil a un “sí quiero” a la vida. Con su color coral, su escote halter cruzado y su vuelo alegre, es perfecto para planes que se alargan, para tardes en buena compañía y para quien no quiere pasar desapercibida. Fresco, insinuante sin ser obvio, alegre sin ser estridente. El algodón le da estructura y ligereza a partes iguales. Basta con verte en el espejo para saber que va a ser un buen día y un paseo junto al mar inolvidable.

PVP 107 €.